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Navegación segura |
Los
tiempos cambian y actualmente estamos en un nuevo mundo en
lo que hace a la comunicación y oportunidades para
que los niños se comuniquen y relacionen. Dos preguntas
surgen: ¿Están ellos preparados para estos avances?
¿y nosotros? |
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En
el tiempo que uno demora en hacer click con el mouse de una computadora,
nuestros hijos pueden estar en línea y comunicarse con todos
aquellos que estén dentro de su carpeta de contactos, que puede
ser muy variada, tanto que si nos pusiéramos a investigarla,
más de una vez llegaríamos a preocuparnos. No sería
grave que encontremos parientes y amigos, compañeros de estudio
o amigos de la Iglesia, todos que probablemente conozcamos personalmente
o por referencia. Pero no sería de extrañar que aparezcan
muchos que ni siquiera ellos conozcan personalmente, de esos 'amigos'
que surgen de las salas de chats, blogs, Messengers, etc. y que en
más de un oportunidad aparecen intempestivamente en nuestro
monitor queriendo ser nuestros amigos virtuales, dejando en un simple
click la opción de aceptarlo o no. |
Cómo
adultos y padres enfrentamos un doble desafío ante todo este
bombardeo de avances tecnológicos. Por un lado, muchas veces
nos cuesta entenderlos y manejarlos, si es que nos animamos a hacer
uso de ellos. Si bien es cierto que ofrecen increíbles ventajas,
también como adultos estamos seriamente expuestos a riesgos
severos si no mantenemos un firme código de conducta.
Por otro, aún cuando decidiéramos prescindir personalmente
del uso, sería sumamente riesgoso hacerlo en nuestra función
de padres y líderes porque dejaríamos de entender un
aspecto importante en la vida de nuestros hijos y su vida social.
No comprenderíamos mucho del lenguaje que usan y, lo que sería
mucho más grave, no estaríamos en condiciones de advertir
muchos peligros a los que, por inexperiencia y/o juventud, podrían
exponerse por un mal uso o por enfrentarse inocentemente a personas
malintencionadas virtuales, pero muy reales al momento de evaluar
el daño que pueden hacer. |
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Para
entender mejor estos peligros a los que niños y jóvenes
de los que somos responsables están expuestos, es útil
mencionar algunos conceptos y estadísticas que expertos y profesionales
en el tema han dado: |
- 15%
de todos los sitios de Internet están relacionados
directa o indirectamente con la pornografía.
- Sus
hijos están a sólo 1-2 clicks con mouse
de acceder a uno de ellos en cualquier momento, aun accidentalmente
- Estudios
dicen que su hijo tiene un 100% de probabilidades de encontrarse
con un pervertido en una sala de chat
- Hay
372 millones de páginas pornográficas
- 25%
de las búsquedas están relacionadas con
la pornografía.
- El
grupo de 8 a 16 años es el que más accede
a páginas con este tipo de contenidos, mientras
hacen tareas escolares
- El
35% de las descargas están relacionadas con el
sexo
- Los
ingresos de pornografía en EEUU exceden los ingresos
combinados de los multimedios ABC, CBS, y NBC
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Si
bien estos datos pueden asustar tanto que nos lleve a la tentación
de prohibir el uso de internet en el hogar, no es la solución
y tal vez estaríamos haciendo un daño importante a nuestros
hijos. Son demasiadas las ventajas que pueden obtener en su educación
y formación como para privarlos de ellas. Así como seguramente
dedicamos muchas horas a enseñarles como manejarse en la ciudad
y los advertimos sobre las zonas peligrosas a las que ni siquiera
deben acercarse, quizás sea la época de educarlos para
que puedan circular por la Red manteniéndose alejados de zonas
peligrosas. Por ello, no podemos dejar de interesarnos en la tecnología
que nuestros hijos manejan con la misma fluidez que el lápiz
y la goma de nuestro tiempo de juventud.
Algunas sugerencias básicas que conviene que sean tratadas
en una Noche de Hogar y sea decisión de familia.
Navegador:
Busquen usar navegadores de nombre reconocido, como el Explorer, Netscape,
Firefox, Google Chrome, etc. y en las Opciones de Internet relacionadas
con la seguridad elijan por lo menos el nivel medio o medio-alto.
Activen el Historial que nos permitirá tener un registro de
las páginas y sitios visitados (y controlen que el mismo no
sea cambiado). |
Descargas:
Internet puede ser una enorme fuente de programas, imágenes
y juegos gratuitos. Sin embargo, también puede ocasionar problemas
con los virus y otras formas de programas o software nocivos (troyanos,
espías, etc.), así como pueden tener acceso a la memoria
de su PC. De acuerdo a la madurez de los hijos establezcan normas
para las descargas y no vendría mal que tanto los sitios como
los materiales y programas a descargar pasen por su supervisión.
Muchos sitios tienen la apariencia de 'corderos' pero son 'lobos rapaces'.
Considere, de acuerdo a su criterio como padres, la posibilidad de
instalar programas que limiten las descargas en forma parcial o total
y/o que monitoren la navegación.
Correo electrónico:
El spam (correo no deseado) es perverso y no distingue edades. Mucho
del que cicula en el mundo tiene ofertas relacionadas con el sexo,
con texto, imágenes y links. El algunos casos, tambien archivos
adjuntos con tentadoras promesas al abrirlos.
Fijen como regla NO ABRIR ningún correo de personas que no
conozcan y no hacer clic en ningún enlace ni abrir archivos
si no proviene de un email conocido. No respetar esto puede llevarlos
a sitios web no apropiados o los archivos adjuntos pueden contener
virus con la capacidad de hacer mucho daño a su PC y a la información
contenida. |
Messengers,
Salas de chat y Blogs:
El MSN, Yahoo Messenger, Facebook, Skype o similares son un medio
de comunicación casi inevitable en esta época. Controlen
periódicamente los contactos para asegurarse de que ningún
desconocido tenga la posibilidad de entrar en conversación
con uno. No acepten como contacto a nadie que no conozcan, por más
interesante que parezca. Uno no tiene forma de saber quien está
detrás de un nick ni sus intenciones.
Las salas de chat son muy riesgosas. Hay medios mucho más seguros
en todo sentido para comunicarse virtualmente.
Los Blogs están de moda y dan una gran variedad de posibilidades.
Conozcan los blogs de sus hijos, lean el tenor de los mensajes escritos
y las fotos que suben. Conozca los nicks que usan. Hay mucho contenido
en los nicks.
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Como
reglas generales pueden establecer que:
Solo los padres cambian la configuración del navegador. Si
los hijos sugieren algún cambio (ellos suelen saber más
de esos temas), evalúenlo juntos y hagánlo Uds. Si tienen
dudas, consulten a algún amigo que entienda más.
Busque que la computadora esté ubicada en lugares de la casa
por el que Uds. transiten o que puedan controlar de una pasada. Si
la computadora está en un escritorio o en la habitación
(ojalá que no), asegúrense que la puerta permanezca
abierta.
No deben proporcionar información personal como direcciones,
números de teléfono, nombre o situación de su
colegio, ni dirección o número de teléfono de
sus padres.
No deben responder a mensajes que sean originados en personas totalmente
desconocidas por ellos, que evidencien ser malintencionados o que
les hagan sentir incómodos. Deben ignorar al emisor y finalizar
la comunicación. La mayoría de los programas utilizados
incluyen la opción de bloqueo total de un email o un usuario,
y esa es la que sin duda deben usar
No es su responsabilidad si reciben un mensaje no deseado, en cuyo
caso, deben avisar a sus padres inmediatamente para que se pongan
en contacto con el proveedor de servicios.
Nunca deben enviar a nadie su foto, datos de contacto ni nada parecido
sin comprobar antes que todo es aceptable.
Nunca deben aceptar, iniciar o mantener encuentros, contacto o comunicaciones
con alguien que hayan "conocido" en Internet sin el permiso
previo de sus padres. Si los padres están de acuerdo con un
encuentro, deben asegurarse de que se realiza en un lugar público
y con la compañía de uno de ellos.
Otro asunto a tener en cuenta es el uso de la PC y de internet cuando
los padres no están en casa o bien cuando acuden a un cyber
o a la casa de un amigo. Deben comprender que las normas establecidas
son para protegerlos y, al igual que los mandamientos y leyes de Dios,
deben obedecerlas sin depender de si están los padres o no. |
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Internet
ofrece privacidad y anonimato, pero eso no da derecho a comportarse
de una manera incorrecta ni deja de lado las normas de educación
propias de una sociedad ni los principios de un Santo de los Últimos
Días.
Decida con sus hijos cuándo pueden conectarse, el tiempo que
pueden pasar conectados, qué sitios son apropiados para ellos
y los motivos para conectarse. Establezca las diferencias entre lo
aceptable y lo no aceptable y defina los castigos por un uso indebido.
Si bien uno confía en los hijos, hagales saber que periódicamente
realizarán controles imprevistos para asegurarse que todas
las reglas acordadas se cumplen. A veces, los más avispados
pueden intentar superarnos con sus conocimientos (y en algunos casos
lo harían fácilmente). Un recurso para tener en cuenta
es revisar la carpeta de archivos temporales, cookies, y ver los nombres
que tienen, aunque nos resulten incomprensibles;es probable que podamos
detectar si navegaron por páginas no autorizadas. |
De
todas maneras, hay muchas maneras en que pueden romperse las reglas
que fijemos. Sin embargo, si estamos alertas y buscamos la inspiración,
podremos compensar nuestra inexperiencia en el manejo de una tecnología
que viene incorporada en los niños de hoy. Lamentablemente,
poco pueden hacer de los cielos si nosotros nos desentendemos. |
Por Ronaldo J. Walker |
Estilo SUD, 11 octubre
2008 |
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